8 de abril de 2009

YO NO CORONO ROLLOS CON BOMBO


Por esto me pienso y me pensaré el llegar a ser padre. No quiero ni imaginar lo que tiene que ser abrir los ojos en una oscura noche de tormenta y encontrártelos a tu lado junto a la cama y mirándote fijamente…
Si en la foto están sonriendo no soy capaz de visualizar el momento en el que algo les de asco, o al paso de los años y con la llegada de la pubertad ese precioso momento que es la pérdida de virginidad (en su caso presumiblemente previo pago, Cash baby!) y su mueca en el momento de eyacular esos gametos que por primera vez no irán a parar a las alcantarillas. Pobre ella, que estará al otro lado de la cama.

Todo un clásico este último, pero es que no me canso de verlo...